CRUEL

El director técnico de San Lorenzo de Almagro, Diego Simeone, en declaraciones a la prensa ha dicho que el próximo torneo de la AFA, el Clausura 2010, será cruel. Y tiene razón.

Pero no porque las escuadras vayan a competir con buen juego, no porque los clubes se hayan reforzados con los mejores valores propios o contratados, no porque los desaguisados de los árbitros vayan a producir situaciones difíciles.

No. No es por eso. Sucede que como ya sucedió durante el torneo anterior la televisión pública transmitirá todos y cada uno de los partidos del mismo, para beneplácito del hincha de fútbol, y perjuicio del multimedios propietario de la empresa subsidiaria que fue dueña de los derechos de la transmisión. La misma que posee varias señales de cable deportivas, propias o en sociedad con cadenas extranjeras, canales de aire, diarios y revistas, y radios consonantes. Y ellos se encargarán de cumplir lo que Simeone avisó.

¿Que les queda, entonces? Pues hacer lo que hacen a diario con todo el resto de la información que nos infieren: desde mentir, hasta ocultar, alentando las tragedias de perder un partido, el fantasma del descenso, desatando el tremendismo por la eliminación de una copa, ni te cuento de un mundial, aprovechando la complicidad de esos dirigentes de clubes dueño de jugadores que a su vez los necesitan para que les den manija a sus pupilos, con la militancia diaria de sus periodistas que se alegran cuando aquellos jugadores y técnicos que no les chupan las medias se quedan sin trabajo (es notable el regocijo que les produjo la renuncia de Basile y Bianchi en Boca, y el inocultable deseo de que el próximo técnico lo eche a Riquelme, tres tipos que han mantenido una actitud digna ante las empresas periodísticas).

Y a eso se dedicarán, mientras los hinchas vemos a nuestro club gratis por Canal 7, y vemos los goles a cualquier hora por Tv, cable o internet, porque ya nadie los tiene secuestrados. Porque ellos ya no tienen secuestrado al fútbol.